¡Hola Hola! Hemos vuelto una semana más, con una nueva recomendación para todos nuestros fieles lectores. Para comenzar Mayo, hemos decidido que tiene que ser un libro igual de temático que el contexto en el que nos encontramos como comunidad. Esta semana el libro escogido es: “Relatos de una mujer borracha” de Martina Cañas.
Como siempre que presentamos un libro desvelaremos las razones de por qué fue escogido y así poder dar una pequeña reseña del libro en cuestión.
Este libro ha estado durante un tiempo en el ojo público ya que mucha gente ha catalogado su contenido como “obsceno y no apto para todo público” lo que llama bastante la atención. Al leerlo, te das cuenta que la supuesta censura reclamada es únicamente porque busca mirar con menor recelo los escapes del alcohol y el sexo, dejando de lado los prejuicios y castigos sociales que se le asigna al género femenino respecto del masculino. Y por eso, como ella misma dice: "Según manuales, soy alcohólica. Según yo, sociable, sedienta, acontecida y algo ardiente."
Todo comenzó del ocio mismo, Martina, alias borracha pero buena muchacha, decidió en un momento post carrete abrir una página en facebook para conversar sin pelos en la lengua de lo que vivió en sus carretes, o lo que en general sucedía al ser una mujer carretera y borracha, manteniendo su identidad oculta bajo sus seudónimos.
Martina, como personaje principal del libro, cuenta su infancia, su familia, amores y desamores y, sobre todo, las metidas de pata más graciosas de su vida. Es una novela llena de aventuras donde las risas no faltan.
Encuentro que el público objetivo varía pero seguramente si ya has salido de fiesta y tenido tus encuentros amorosos, no dudarás en sentirte identificade con alguna parte de las locuras que se narran. La invitación queda más que abierta, y por si aún no se convencen les dejo mi consejo favorito; Cómo ser una borracha buena amiga:
“Como la María, hoy por ti y mañana por mí. A veces ella me cuida, en realidad, a veces siempre ella me cuida, es conductora designada vitalicia. La María no toma y se cura con el aire, cuando me mira se cura la pobre.”